El coordinador de la asamblea en los Valles de San Vicente, Alfonso Sánchez, considera necesario que el Gobierno autonómico presente estudios que “eviten destrozar la ría”.
Así, considera que “no puede proyectarse un puerto si ni siquiera se sabe por qué la arena se sale del Tostadero”.
En este sentido, la formación de izquierdas respalda la solicitud del Ayuntamiento de San Vicente tras los últimos sucesos, “que se repiten año tras año”, en los cuales “se están produciendo grandes movimientos de arena de la ría hacia las urbanizaciones aledañas”.
Por ello, Sánchez comparte la “enorme preocupación” del consistorio en un problema “que inunda de toneladas de arena” la vía pública que enlaza el Puente de la Maza con la Playa del Rosal a la altura de la playa del Tostadero, en el interior de la ría de San Vicente.
Y asegura que el problema no acaba ahí. “Los cambios en las dinámicas mareales están obligando a reforzar el espigón de abrigo este a la boca de la barra y las escolleras de sustento del sistema dunar se están viendo también afectadas”
Tanto Sánchez como su compañero de formación, el concejal de Obras, Servicios, Medio Rural y Medio Marino de la villa barquereña, Martín Chaves, lamentan “que no existan informes al respecto, teniendo en cuenta que es un caso antiguo y que se están dando multitud de problemas en nuestros estuarios y playas, muchos de ellos relacionados con las transformaciones humanas”.
Desde IU de Valles de San Vicente se ve “con preocupación el futuro” que se plantea. “Si como parece, todo este proceso se está dando por un dragado agresivo de hace unos años, ¿qué sucederá cuando se desplacen 214.000 m3 de arena de la ría, según pretende Mazón?”, pregunta el coordinador local.
En consecuencia, instan a la demarcación de Costas y al Gobierno de Cantabria “a solucionar las cuestiones que se dan en la actualidad, primero, y, en todo caso, a realizar los estudios pertinentes antes de impulsar cualquier actuación en la ría, o a presentar públicamente estos informes, en caso de tenerlos ya, antes de tener que lamentar desastres evitables”.