Izquierda Unida-Equo (Marea Cántabra) ha advertido de que “los trabajadores no pueden esperar más a que se les tome en cuenta”, y han afirmado que “los trabajadores no pueden ser nunca más quienes carguen con el peso de la crisis y sean los últimos en notar la recuperación”, por lo que han reclamado medidas “que pongan fin a la precariedad que sufren miles de trabajadores cántabros”, como la derogación de las dos últimas reformas laborales.
Miembros de la confluencia de izquierdas, feminista y ecologista, como el candidato a las elecciones, Israel Ruiz Salmón o la coordinadora de IU y número 4 de la lista autonómica, Leticia Martínez, han participado en la manifestación del Primero de Mayo , donde han garantizado que “la Marea Cántabra estará siempre con los trabajadores, en la calle y en el Parlamento a partir del 26 de mayo”.
Así, han recordado su reciente apoyo a los trabajadores del metal o, en estos momentos, a los trabajadores de Sonrionansa, la antigua Tinamenor, en Val de San Vicente, recordando que la apuesta de Izquierda Unida-Equo-Marea Cántabra es un modelo laboral en el que “los trabajadores tengan el poder”, como sucede con Vitrinor, cooperativa que han visitado esta semana, frente al modelo de “empresarios cazasubvenciones que han fomentado PP, PSOE y PRC”.
En la lista de la confluencia de izquierdas, feminista y ecologista hay destacada presencia de trabajadoras y sindicalistas, como Cristina Puente, sindicalista de UGT en la conservera Sistemas Britor, muy activa en las movilizaciones contra los abusos de esta empresa; Virginia del Moral, una de las 9 de AON de CCOO, que fueron despedidas por presentarse en una lista sindical en esta empresa del sector del telemarketing, o los también miembros de IU y sindicalistas de CGT en el ferrocarril y USO en la enseñanza, Sergio Tamayo y Ainara Bezanilla, respectivamente.