El portavoz autonómico de Izquierda Unida y concejal de Unidas por Santander, Miguel Saro, reclama al Ayuntamiento de la capital cántabra y al Gobierno central que “se pongan de una vez de acuerdo” y “encuentren una solución que zanje de una vez la situación de la playa de La Magdalena”.
El edil santanderino se pronuncia así tras la “enésima polémica”, causada en este caso por el Ejecutivo central, al descartar el secretario de Estado de Medio Ambiente, el socialista Hugo Morán, la posibilidad de hacer rellenos de arena en la playa, pero sin ofrecer una solución alternativa y concretar la retirada de la escollera “que había anunciado su propio gobierno y su propio partido”
En un comunicado, Saro ha recriminado a ambas instituciones, Ayuntamiento y Gobierno, su “falta de claridad y coordinación en un asunto que es importante para los santanderinos”, y ha recordado que la “descoordinación” entre ambos “ya se tradujo en el pasado en un daño no reparado en el paisaje santanderino, el despropósito de la senda costera”.
El concejal precisa que es “evidente” que en la Corporación municipal existe una mayoría en contra de las escolleras y a favor de los rellenos, que abarca “incluso” a los propios socios del equipo de Gobierno del PP, Ciudadanos, que pusieron la marcha atrás con las escolleras entre las condiciones para la firma del pacto. Por tanto, “si renuncian a su retirada, estarán demostrando que el acuerdo se firmó sobre premisas falsas y siembra dudas sobre su validez en su conjunto” que se “desmoronan a la primera de cambio”.
Para Saro, la solución “ideal” sería suscribir un convenio económico, estable en el tiempo, con el Gobierno central para que se acometan los rellenos de una forma adecuada y periódica.
“El Estado no puede ocultarse en unos informes técnicos que obvian que los rellenos pueden hacerse, por lo que se trata de una decisión política, y el PSOE debería romper su silencio y mediar con sus propios compañeros para recordarles que es lo que quieren los santanderinos”, aseveraba el portavoz de IU.
Así, defendía que “los convenios entre el Estado y los ayuntamientos son habituales”, además de que la figura del convenio “daría estabilidad y evitaría la constante tensión cada año en torno a los rellenos”.
“Aunque sean competencia del Estado, Santander tiene que poder decidir y actuar sobre su territorio”, recalcaba, remarcando que la mayoría de los partidos de la Corporación santanderina y los colectivos sociales y ciudadanos como la plataforma Salvar La Magdalena piden “algo muy sencillo: retirar las escolleras y mantener la playa”, doble objetivo que “se cumpliría de sobra con los rellenos y el convenio con el Estado”.