Desde la formación destacan que Cantabria no es ninguna excepción, pues las y los jóvenes cántabros han sufrido tanto como en el resto de las regiones europeas las lesivas políticas del bipartidismo y la Troika. Situando la tasa de paro en Cantabria por encima del 21,6% el doble que la media Europea según Eurosat.
“La juventud merecemos la oportunidad de construir nuestra vida en condiciones dignas, y queremos una Unión Europea que luche contra la pobreza y la exclusión social, que ampare nuestros derechos educativos, que proteja nuestra libertad sexual y reproductiva, que haga imperar a la solidaridad y la justicia social, y que sea el paraguas bajo el cual todos y todas podamos construir un futuro de felicidad”. Declara Isabel Crespo, candidata de la Izquierda Plural al Parlamento Europeo.
Desde la coalición el panorama que se observa es un tanto desolador, y que obvian los miembros del bipartidismo:
España es el primero en el ranking de desempleo juvenil, con un 55´49% de los menores de 25 años sin trabajo. Sin embargo, no es un problema específico del Estado Español, es un problema estructural de la UE, que soporta un desempleo juvenil del 25%. Del 40% si solo miramos a los países del sur, los más afectados y presionados por las recetas de la Troika (Comisión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional).
Sin embargo, la tasa de desempleo es solo la punta del iceberg. Los menores de 35 años acumulan el 90% del empleo destruido desde 2009 en España. La renta media de los jóvenes ha caído ocho veces más que la de las personas de entre 45 y 64 años. El 38% solo cobra entre 428 y 857€ al mes. Sueldos precarios con los que es imposible hacer planes de futuro.
“Con estas condiciones se pretende tener grandes masas de jóvenes cualificados y sin empleo, que sirvan de excusa a los empresarios para tirar hacia abajo los derechos y las condiciones de la clase trabajadora”, señala Crespo.
“Este panorama, negado por el PP y soslayado por el PSOE, empuja a cientos de miles de jóvenes al exilio económico. Obligados, expulsados, tienen que salir de su tierra para ganarse la vida en condiciones de precariedad”, señala Isabel Crespo. Y es que, como señala IU, el número de emigrantes ha aumentado un 41% desde 2008, siendo entre 300.000 y 700.000 las y los jóvenes que han tenido que partir para tratar de vivir una vida digna lejos de este país, que les ha formado y preparado, pero que no les da una oportunidad para iniciar un proyecto vital. “La inexactitud de los datos de emigración es la prueba más palpable del desinterés que tiene este gobierno por el bienestar de sus migrantes, pues solo les ve como una molestia que engorda sus sonrojantes listas de desempleados”, señala la candidata al Parlamento Europeo.
Pero, ¿cuál es la alternativa? “Desde luego, Alemania no es nuestro ejemplo a seguir, que tiene un desempleo maquillado gracias a ocho millones de contratos temporales por 400€/mes, y un 10% de trabajadores pobres”, señala Isabel Crespo, que continúa diciendo que “tampoco estamos conformes con el paupérrimos plan de empleo de Garantía Juvenil, cuyo dinero va a ser utilizado principalmente para aplicar bonificaciones fiscales a los empresarios que contraten a jóvenes, sin observar las condiciones de esos contratos”.
“Nuestra solución para el desempleo pasa por generar valor añadido, redistribución y justicia social a través de la reindustrialización de la economía, implantando un modelo fiscal que consiga que, por primera vez, Botín pague porcentualmente más impuestos que su chofer, no pagando la deuda odiosa contraída contra los intereses de la población, y nacionalizando los sectores estratégicos para ponerlos al servicio de todos los ciudadanos. En definitiva, la alternativa de Izquierda Unida se basa en llevar el poder de la gente, demostrado en las calles, a las instituciones, para luchar contra el bipartidismo y la Troika, y construir un futuro solidario, justo y feliz”, finaliza Isabel Crespo.