El concejal de Izquierda Unida en San Felices de Buelna, Ceferino San Millán, ha recriminado al alcalde del municipio, José Antonio González de Linares, su “absoluta falta de interés” por el conflicto laboral en Global Special Steel Products, la antiguaTrefilerías Quijano.
En un comunicado, San Millán ha recordado que la plantilla de este “emblemática” fábrica del Valle de Buelna, en la que trabajan familias tanto de Los Corrales como de San Felices, lleva encadenando varios días de paros y ha anunciado incluso una huelga indefinida ante el aumento del peso de las subcontratas en la fábrica.
El edil de la formación de izquierdas en el municipio ha ensalzado la trayectoria de “lucha y dignidad” que han mostrado a lo largo de su historia los trabajadores de Trefilerías Quijano en momentos en que la fábrica estuvo “en el filo de la navaja y al borde del cierre”.
“La batalla de ahora también es por la supervivencia de la fábrica”, ha afirmado Ceferino San Millán, quien incide en que “la industria era uno de los sectores que resistían a la precariedad que todos conocemos en el resto del mercado laboral”, por lo que “los trabajadores de Trefilerías lo que están haciendo es resistir los embates de un asedio en toda regla a lo que para la gente de Buelna es mucho más que un puesto de trabajo, es un modo de vida y una parte de nuestra historia”.
Por tanto, el concejal de Izquierda Unida en San Felices de Buelna reprocha al alcalde que “su falta de interés no es sólo un incumplimiento de sus obligaciones con sus vecinos: es un desprecio y una bofetada a la propia esencia e historia del valle y a un legado histórico de lucha y reivindicación”.
Tanto San Millán como la edil de IU en Los Corrales de Buelna, Elsa Salas, siguen el día a día de la plantilla, compartiendo sus horas de concentración y protesta y seguirán con su apoyo a la huelga convocada. “Cuando se pone en riesgo el pan de nuestras familias y nuestros pueblos, nuestro deber es acudir y hacer lo que esté en nuestra mano”, aseveraba.
Desde la formación de izquierdas, que en campaña se pronunció sobre la situación de otra fábrica amenazada en el valle como es Fundinorte, se remarca que los trabajadores en huelga “no pretenden el despido del personal subcontratado”, sino, al contrario, “que sean reconocidos como puestos de la propia empresa”.
Sería, por tanto, con las mismas condiciones, de forma que “abandonarían” la precariedad y temporalidad, además de suponer una “vacuna” contra las “tentaciones de la empresa de que toda la plantilla fuera subcontratada”, remarcaba San Millán. “No podemos llenarnos la boca hablando de la necesidad de nuevas inversiones en el Valle y al mismo tiempo dejar que se desmorone aquello que lleva décadas formando parte de nuestro patrimonio industrial y social”, aseveraba