Reclaman a su vez que el kilometraje no efectuado debido a la huelga de los trabajadores no sea abonado a la empresa
El pasado mes de julio, Izquierda Unida y Podemos solicitaron al Ayuntamiento de Castro-Urdiales que se acogiera al decreto del Gobierno central para descontar el 30% del precio del billete del Castro Bus con cargo al presupuesto del Ministerio de Transportes, y un 20% adicional con cargo al presupuesto local. Una iniciativa que tras la solicitud al equipo de gobierno “nos confirmó que ya estaba en trámite” aclaran.
Los líderes locales de ambas formaciones, Pablo Villasante y Alberto Martínez, se muestran “satisfechos” de que esta subvención vaya a ser aprovechada por el ejecutivo local y, sobre todo, “del logro conseguido para paliar los efectos de la inflación que nos está afectando a todos”.
Villasante, hace hincapié en que “IU y Podemos han sido los únicos partidos que han solicitado que el ayuntamiento se acoja al descuento, aprovechándonos de la partida dispuesta por parte del Gobierno de España. Esto nos demuestra que seguimos estando en contacto en la calle con los vecinos y vecinas de Castro y mejorar así nuestra economía doméstica”.
“Hoy más que nunca, con la inflación desbocada y con el pésimo estado de los autobuses que la empresa ALSA sigue manteniendo en nuestro servicio local de transportes, se torna necesario el descuento del 50% en el precio del billete que estará en vigor desde el 1 de septiembre hasta el 31 de diciembre de este año”, señala Martínez.
IU y Podemos inciden sobre la necesidad de la rebaja debido a que llega en un momento “de máxima crispación” entre trabajadores y la empresa ALSA como consecuencia del “lamentable estado de los vehículos, en ocasiones, altamente perjudiciales para la salud de los trabajadores” además de “la gran insatisfacción de los usuarios con las numerosas deficiencias con las que imparten el servicio”.
Por último, indican que van a solicitar que “se controle exhaustivamente el kilometraje de los trayectos no realizados durante las jornadas de huelga, convocadas por los trabajadores del servicio”. Sospechan que ALSA se esté “beneficiando de la huelga al amortizar el Ayuntamiento a la empresa la totalidad de frecuencias sin descontar las no realizadas, queremos asegurarnos de que ese kilometraje no se abone a la contrata en ningún caso”, finalizan.